Lo que aprendimos de Iniciativa México
El domingo 7 de noviembre, Iniciativa México (IMx), el esfuerzo de la sociedad y de los medios por ayudar a quienes más ayudan, llegó a su final.
Después de revisar 47,000 iniciativas, de las cuales se seleccionaron 25 participantes, y tras cinco meses al aire, hoy sabemos cuáles son algunas de las organizaciones más destacadas que están cambiando a México. Felicidades a Raúl, Mariana, Héctor, Miguel y a los otros 21 participantes.
Me llama mucho la atención que todos los medios de relevancia nacional hayan participado en este magnífico esfuerzo. Pero esto es sólo la punta del iceberg: en México hay cientos de miles de personas que están haciendo esfuerzos valiosos para construir un mejor país, sin la esperanza de obtener reconocimiento o recurso alguno. Ellos también merecen nuestro apoyo y debemos actuar.
Les presento una propuesta: si de cada 100 pesos que los contribuyentes pagamos de impuestos le dedicamos uno -sí, un solo peso- a apoyar directamente a alguna de estas organizaciones, previamente acreditadas, estaríamos ofreciendo un respaldo gigantesco, veamos.
El gobierno tiene mucho dinero para gastar. Este dinero es nuestro, de la sociedad. Entre impuestos, derechos, contribuciones, aprovechamientos, etc., la Ley de Ingresos creó una bolsa de más de 3 billones de pesos para ejercer en el 2011. Esto significa que el gobierno gastará el año que viene 392 millones de pesos cada hora. ¿Por qué no podemos los ciudadanos disponer de unas cuantas horas de este gasto para destinarlo a quienes se esfuerzan por los demás?
Si hacemos esto, crearemos una trilogía virtuosa: en primer lugar, los ciudadanos y el sector privado, que somos quienes generamos la riqueza y pagamos todos los impuestos; en segundo, el sector gubernamental, que seguirá ejerciendo el 99 por ciento de su gasto para realizar sus actividades; y en tercero, fortaleceremos a un sector social que es el que mejor ayuda a quienes menos tienen.
Iniciativa México nos enseñó el enorme potencial de las organizaciones sin fines de lucro. Después de ver lo que hacen con tan pocos recursos, estoy convencido que debemos apoyarlas más. De esta manera, el sector social puede transformar a nuestro país.